El amor es como el odio
El amor es como el odio
Cuando se torna quimera
Vuelve al corazón demonio
Y a la razón, puñetera.
Como el río a su ribera
Me siento como microbio
Sin su querida bacteria
Todo se torna de un gris
Ausente y sin equipaje.
Sin ti, me siento morir
Que difícil se hace el viaje
Cuando no quieres vivir.
8 elucubraciones
Ummmm, precioso poema de desamor, me encantó.Lo que duele el desamor ¿verdad? pero siempre queda la esperanza y si no, siempre hay "un roto para un descosido".
Besos, señor poeta
Siempre puedes secuestrar y realizar el viaje juntos.
Terminará por gustarle y nunca te denunciará.
Vaya palabrita el desamor... es una pequeña herida...que mudamente crece..
Espera...a la vuelta, encuentras un remedio... que te trae la primavera..
Si hay desamor tiene que existir el amor. Nos tenemos que alegrar por tanto de que exista.
un saludo desde www.losporquesdesantiago.com
Creo que cuando amamos, de antemano, sabemos que acabaremos sufriendo. Y aún así nos arriesgamos. Como algo inevitable y necesario. Y luego llega la pena y nos regodeamos en nuestra tristeza y morimos... porque morimos un poco. Y luego descubrimos que somos capaces de seguir viviendo y seguimos adelante. Y todo vuelve a comenzar.
Tu poema es estupendo y mi comentario, delirio.
Un abrazo grande.
Hace falta caer para saber levantarse.
Qué difícil se hace el viaje cuando no queires vivir. lo peor del viaje, es cuando no se quiere, aparentemente vivir, y uno se lleva por delante, vidas ajenas que se conforman con ser cajeras de Mercadona.
Cuando no se quiere vivir, es una excusa para un verso. Cuando no se quiere vivir...hace tiempo que ya estás muerto.
Como dice un amigo mío, y no lo olvidemos: " que los vivos somos muertos de permiso". La cogió R. Martínez- Simancas del enterrador jefe de la Almudena(cementerio madrileño).
Tiene alma de poeta la censura u y sus vergüenzas. Hay que andar, sin vergüenza.
se hace fácil leer, escribir, viajar, sentir-vivir acompañado de cualquier arte, no andar en ciertas mortajas ajenas no aptas para el vuelo literario, la pena siempre merece la pena y la poesía, libertad y alegría a fin de cuentas
saludos compadre
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